Hasta hace unos años, integrar el aparato de televisión en la decoración de nuestro hogar era prácticamente imposible salvo que recurriésemos a ingeniosos muebles para camuflarlos. Desde armarios de estilo oriental o muebles de salón con ingeniosas puertas correderas que permitían que el gran aparato no fuese el elemento visual imperante en la habitación, ya fuese el salón, la habitación de estar o un dormitorio.
Afortunadamente, con la llegada de los televisores tipo flat o plasma, ese problema ha desaparecido en buena medida, porque los nuevos diseños nos permiten colocarlos en casi cualquier estancia sin que llamen la atención e incluso, en algunos tipos de decoraciones más urbanas, minimalistas, o con predominancia de colores blancos y negros o cromados, casi invisibilizarlos.
Si a pesar de sus cada vez más discretos modelos y sus superficies y diseños extraplanos, sigues queriendo que el aparato de televisión esté presente pero pase lo más desapercibido posible, puedes recurrir a algunos trucos, como por ejemplo, enmarcarla y rodearla de otros cuadros, espejos u objetos enmarcados. La esconderás dándole protagonismo, como en los mejores libros de misterio.
El optar por dar protagonismo a través del color o el diseño a otros muebles (un diván, una chaise longe, un sofá u otra pared pintada en un color o empapelada con un papel pintado llamativo) u objetos de la decoración. También es posible equilibrar la decoración usando el color del aparato de televisión blanco, negro, cromado u otro para añadir objetos u elementos decorativos en esos mismos colores, una forma fácil de balancear el resultado decorativo, quitando protagonismo a este electrodoméstico.
Como ves, las opciones son muchas. ¿Cómo has integrado tú el tv en la decoración de tu hogar?
Fuentes: ElLitoral, Decoratrix, HogarTotal