Si has sentido que le falta un poco de iluminación a tu hogar y luego de tomar algunas medidas al respecto no has quedado satisfecho, te recomendamos utilizar el color amarillo como un aliado de tu decoración.
El color amarillo en su tono mostaza es ideal para pintar las paredes de tu salón y darle vida a ese espacio en que tanto te gusta pasar el tiempo con tus seres queridos charlando, con una alfombra de colores variados y con el color rojo presente en mueble y otros adornos como cuadros, lograrás crear un ambiente fresco y dinámico.
La cocina que te presentamos es un ejemplo de cómo el color amarillo y el blanco se combinan perfectamente y te evitan correr el riesgo de sobrecargar tu decoración, permitiendo a estas paredes, estantes y compartimientos lucir un color vibrante sin perder la sensación de amplitud que proporciona el color blanco.
Los muebles de color amarillo son una manera de llevar este color a tus espacios sin tener que modificar la decoración existente, transformando habitaciones y bibliotecas en espacios modernos.
Finalmente te mostramos como sacarle partido exitosamente al color amarillo en tu habitación, esta vez en un tono más cítrico y combinado con elementos de color blanco y de madera.
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