Cuando dos estilos tan diferentes como el colorido y abigarrado estilo hippie con sus paredes atestadas de colores, formas, pañuelos, telas pintadas, estampados, patchwork o cortinas de cuentas se mezcla con el más depurado glamour urbano, el resultado no podía ser otra cosa que impactante, fresco y muy chic. Surge así una tendencia que no acaba de llegar con fuerza pero tampoco deja de verse por completo. Un estilo solo para gente atrevida: el estilo hippie chic.
Telas bordadas, estampados inspirados en diferentes etnias, flores de mil colores, alegres banderines, animales de juguete, mariposas, imágenes psicodélicas o algo de arte pop se reúnen en este estilo que, al contrario que su inspirador estilo hippie en su modo más puro, se basa más en los detalles que en los muebles o los espacios y paredes, aquí generalmente más depurados o sencillos y clásicos.
Puedes recrear este estilo hippie chic combinando detalles del más puro estilo hippie sobre una base de muebles sencillos y de colores neutros. El efecto será aún mejor si son un poco vintage. Esto permitirá que si su colorido te acaba cansando o pasa de moda, la inversión haya sido mínima y puedas renovar de nuevo la decoración de tu hogar con solo algunos pequeños cambios.
También es una buena opción para la decoración de temporada, o para decorar espacios juveniles, infantiles o de juegos, pues su aire fresco, colorido y sencillo les encanta siempre a los más jóvenes de la casa. Si te atreves lo comprobarás.
Fuentes: Decoesfera, MissRealCool, UrbanOutfitters,
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Muy buena combinación en el dormitorio