Es solo una zona de paso, pero el pasillo no tiene por qué ser una "zona aburrida" decorativamente hablando. No siempre los pasillos son perfectos para decorar, pero es justo ahí donde debemos emplear todos nuestros trucos decorativos para conseguir que esa entrada, o ese paso de una zona de la casa a otra, no desentonen con el ambiente del resto de nuestro hogar.
Los pasillos suelen ser estrechos y oscuros (por supuesto, hay excepciones de pasillos amplios o con ventanales y si tienes uno de esos ¡enhorabuena!) por lo tanto, debemos buscar una sensación de amplitud y claridad. Para que un pasillo pueda quedar bien decorado, hay dos claves fundamentales: el primero que la iluminación es fundamental, el segundo, es que no debemos "estrecharlo" más con excesivos objetos que impidan el paso.
El tipo de iluminación depende del tipo de pasillo. Puede haber halógenos que enfoquen hacia el techo, si queremos que éstos parezcan estar más altos y añadir alguna luz indirecta. También son buenas las luces de techo centradas y, de nuevo, alguna lamparita o aplique de pared que ilumine indirectamente siempre que el pasillo no sea demasiado estrecho y lo haga empequeñecer aún más.
Salvo que haya luz natural, o el pasillo sea ancho, debemos optar por colores claros que nos ayuden a multiplicar el espacio. También son muy efectivos los colores brillantes que encuadran a la perfección en los estilos más modernos, como los industriales y minimalistas.
En definitiva, intentaremos eliminar las barreras visuales, usar las alfombras como estrategia decorativa: horizontal para ampliar, una sola alfombra para alargar, dos para acortar si es un pasillo excesivamente largo.
Si pones muebles, que tengan un uso, porque si no ¿para qué introducir un elemento que roba espacio y no tiene funcionalidad? Además, si puedes, elimina algunas puertas o ponles colores o molduras visualmente ligeras y tu pasillo será funcional y estará bien decorado.
Fuentes: HogarTotal, WomanlyPage, DecoEsfera, VintageandChic,