Si hay algo que no falta en ninguna casa son fotografías. Grandes, pequeñas, modernas, antiguas, viejas, de la familia, de casas, de viajes o de paisajes. No importa, sean en papel o en formato digital las fotos nos rodean.
Si eres de quienes te has resistido a tirar tus fotos en papel fotográfico o incluso las que has acabado imprimiendo en un folio o una tarjeta de forma un poco chapucera, alégrate porque la tendencia decorativa del momento es llenar la casa de fotografías.
Y no te espantes porque no se trata de llenar cualquier superficie de esos portarretratos con un pie que siempre acababa cediendo y cayendo hacia atrás, o agarrando polvo sobre las mesas como en las casas de nuestras abuelas. Ahora, las fotos llenan las paredes.
Pueden ser en blanco y negro, colgadas, pegadas o en forma de fotomural, solo hay un requisito: que ocupen mucho espacio. Puedes usar una muy grande, ampliada según las más modernas técnicas en lienzo o vinilo para toda una pared, o muchas agrupadas de forma regular o irregular.
Además, ahora las fotos se cuelgan de las paredes, del techo, de alambres decorativos de estilo industrial sostenidas con pinzas metálicas, con pinzas para la colada en los estilos más kitch o con lazos en los más románticos.
Como cenefas en cualquier habitación, como cabeceros en un dormitorio, acompañando el recorrido de pasillos o escaleras o tomando posesión de cualquier pared en el living, salón o sala de la casa.
Busca en los cajones y baúles, rescata tus fotos preferidas y unos marcos antiguos o modernos y lánzate a decorar la casa con fotografías, conseguirás modernizarla, dejar cajones libres y darle calor de hogar.
Fuentes: Algo+qmarcos, FotoRicardo, DecoraHoy,